Meta, la compañía antes conocida como Facebook y dueña tanto de esa red social como de Instagram, ha sido multada por no permitir a sus usuarios escoger la opción de no compartir datos.
La Data Protection Commission (DPC) irlandesa – el equivalente en ese país a la Agencia Española de Protección de Datos – acaba de anunciar la conclusión de dos investigaciones que había arrancado sobre el procesamiento de datos en Facebook y en Instagram y si se estaba cumpliendo la norma europea de protección de datos, la GDPR.
El organismo ha determinado que no se estaban cumpliendo las condiciones y ha multado a Meta con 210 millones de euros por sus infracciones en Facebook y con 180 por lo mismo en Instagram. Un total de 390 millones de euros que Meta deberá pagar, además de ajustar sus operaciones de procesado de datos para que se ajusten a lo que marca la norma, antes de 3 meses.
Aunque quien ha investigado y llegado a la conclusión es el organismo de protección de datos de Irlanda, la multa no es solo por lo que ocurre en este país. Este organismo ha sido el que ha investigado porque Meta está en Irlanda, pero las dos quejas que arrancaron el proceso sobre el mismo problema fueron realizadas en Austria (contra Facebook) y en Bélgica (contra Instagram).
La esencia del problema
Las dos quejas apuntaban que en 2018, cuando las dos redes sociales cambiaron los términos de uso para adecuarlas a la GDPR, se hacía imposible seguir utilizándolas sin aceptar los términos de servicio que Facebook e Instagram ofrecían: o hacías clic en aceptar que se procesasen tus datos personales, o no podías seguir usando tanto Instagram como Facebook.
Por tanto, según considera ahora la DPC, no se está cumpliendo realmente la norma, ya que se deja a los usuarios escoger si quieren o no que se usen sus datos. Es decir, que Meta no estaba cumpliendo con sus obligaciones en transparencia al no quedar claro a los usuarios qué iba a pasar con sus datos y con este consentimiento forzado no se estaba dando una base legal a ese uso de la información.
3 meses para que la publicidad de Facebook e Instagram se vea afectada
Pero más allá de la multa millonaria, lo crucial de esta decisión no es solo que se haya multado a Meta, sino lo que podría cambiar en su futuro inmediato. Como recuerda The New York Times, la decisión del organismo podría afectar a la publicidad en Facebook e Instagram porque, al final, lo que está diciendo es que Meta estaba obligando a sus usuarios a recibir publicidad personalizada.
En esos tres meses que le han dado, Meta tendrá que cambiar cómo recaba ese consentimiento de los usuarios y, aunque la sentencia no dice exactamente qué debe hacer Facebook e Instagram, se prevé que, al corregir el error, tendrá que ofrecer a sus usuarios la opción para evitar que se recopilen sus datos.
Estos datos son la clave de por qué, para Meta, estos anuncios son la base de sus ingresos publicitarios. Y, como recuerda The Times, esto podría tener ramificaciones mucho más allá de Europa: para cumplir las normas comunitarias, muchas veces, las compañías aplican los cambios a nivel global, puesto que hacerlo solo para Europa resulta demasiado caro.
Fuente: puromarketing.com